United Arab Emirates
"Life and death, energy and peace. If I stop today it was still worth it. Even the terrible mistakes that I made and would have unmade if I could. The pains that have burned me and scarred my soul, it was worth it, for having been allowed to walk where I've walked, which was to hell on earth, heaven on earth, back again, into, under, far in between, through it, in it, and above." - Gia Carangi

30.11.10

Infierno en el boliche: el macho baba

Extracto de Natypedia:


El macho-baba es el tipo de hombre que tiene la fijación idiota de que sus posibilidades de ponerla son proporcionales a la insistencia. El macho-baba se endeudará en una noche intentando emborrachar a la mujer que lleva cinco horas vomitando pero aún así no muestra interés. El macho-baba se caracteriza por no tener ninguna habilidad consecuente. Por lo tanto no es raro ver al macho-baba intentando ocultar su falta de atributos con 25 toneladas de gel o un auto que compró usado pero invirtió el doble de dinero en ponerle pelotudeces con flamas y luces de neón.


El macho-baba actuará impulsivamente como neanderthal descontextualizado. Intentará besar a la hermbra-asfixiada aunque ella lo haya empujado, insultado y gritado que la dejara sola. Puede meterse en peleas de bar a ver quién tiene el garrote más grande solamente para impresionar a la dama. Esto es porque el macho-baba tiene el mismo patrón de comportamiento que la mosquita frutera: más intentas espantarlo, más adentro del hipotálamo se instala.


Entre otros sinsabores, el macho-baba tiene la absoluta -pero obtusa- certeza de que de que cada "¡NO! ¡LA CONCHA DE TU MADRE!" de la hembra-asfixiada es, en realidad, una súplica enardeciente y pasional para que él la haga suya... resultado de la premisa de que toda mujer es histérica.


El macho-baba decide, entonces, que ninguna mujer tiene autonomía real puesto que es tan irresistible que logrará flanquear a la más grande de las histéricas. No se le ocurre que para ese entonces la hembra-asfixiada estará buscando la salida de emergencia más cercana para tomar una bocanada de aire o buscar un modo lo suficientemente directo como para que macho-baba procese en su corto cerebro que es un idiota, insoportable, obtuso, pegajoso, asfixiante, irrespetuoso, primitivo, pajero y refulgitantemente vomitivo.


Pero como si las ruinas circulares se tornara figurativo, el macho-baba volverá a no ponerla y eso afianzará la ceguera que le impide ver que es un triste charco de pegajoso arrastrándose por un agujero -cualquier agujero- que no intente sacárselo de encima.