¿Se encuentra la Sra. Subida de Peso?

Ni considerar que mi apellido es poco estético. Ni apellidos vulgares como Gutierrez, Díaz, López o Perez. Ni apellidos avergonzantes como Gay o Torti.

Ningún, absolutamente ningún apellido me generó tal despilfarro de risa como hoy, al oir a mi madre llamar por teléfono a la Sra. S. Gorda.

P.S: Espero no tener que sentarme frente a ella porque definitivamente haré gala de mi falta de tacto escupiéndole el café en el rostro al tratar de contener la carcajada.